jueves, 27 de septiembre de 2007

El adiós a Marcel Marceu

Como seguramente sabrán falleció el famoso mimo Marcel Maceu. Yo me imagino sus últimas palabras. “………. ………. …….. ……..” (Mano en la pared, mano en la pared, tiro de una soga, tiro de una soga). ¿Se habrá echo un minuto de ruido en su honor? Digo yo, cuando ponen en el diario “el mundo lamenta a Marcel Marceu”. ¿No nos tienen en cuenta a los que odiamos a los mimos, y festejamos la desaparición de una de esas detestables criaturas?

¿Vieron que ya casi no se ven mimos en las plazas? Fueron desterrados por las estatuas vivientes, que son como primos de los mimos, pero que no se mueven. Personalmente los detesto incluso más que a los mimos. Porque vos con un mimo te podías agarrar a trompadas, ¿pero como le podes pegar una piña a algo que no se mueve? Seria injusto, como pegarle a retrasados mentales. Perdón ES injusto, SON retasados mentales.
Encima, ahora tienen el “concurso nacional de Estatuas Vivientes” (Declarada de Interés por el Ministerio de Cultura de la Presidencia de la Nación y con el auspicio de la Secretaria de Cultura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires). No puede ser que esta actividad detestable tenga un concurso nacional. ¿Quien gana, el que se queda quieto más tiempo? ¿El que hace mejor de campana, para que le roben a los turistas en la calle florida? ¿Y si un participante es cataléptico, es legal? ¿Hay antidoping, para saber si alguno se tomo un puré de valium para bancarsela? ¿Cómo sería una estatua al prócer de las estatuas vivientes, no sería una contradicción que le hicieran una estatua a ese tipo? ¿Si una estatua viviente tiene incontinencia, es una fuente viviente?

Propongo que cada vez que se encuentren una estatua viviente, se agarren todas las monedas del cajoncito que tienen en los pies. Si el tipo dice algo, pueden llevarselas porque el tipo es un farsante que por un par de monedas se sale del personaje. Y si no se mueve, llevenselas igual que no les va a hacer nada.

Temporada

Jacobo y Silvia Süller, hacen temporada en Mar del Plata. Con algo de suerte llenan un teatro con 6 butacas...